Empezando el pozo «Ummah», el segundo construido en esta aldea de Malawi.
La felicidad, la alegría y el bienestar que este proyecto trae a la comunidad no pueden ser valorados únicamente en términos monetarios. Va más allá, ya que impacta profundamente en la calidad de vida de las personas, su salud, su acceso al agua potable y su esperanza de un futuro mejor
Glorificado sea Dios, continuamos en esta comunidad, un lugar que celebra la apertura de este segundo pozo de España. ¡Alabado sea Dios! Observa la disparidad entre los residentes de este pueblo, entre los prósperos y los necesitados. Este es el pueblo de Enqa. El primer pozo es una bendición, y este segundo pozo es un regalo adicional de España. Gracias a Dios, incluso los niños de esta aldea, que enfrentan la pobreza, ahora encuentran motivo de alegría. ¡Alabado sea Alá! Como puedes observar ahora, elevamos nuestras plegarias a Alá Todopoderoso, para que acepte la generosidad del donante y que este proyecto se convierta en una parte activa de su sistema de beneficencia. La felicidad que trae consigo es incalculable. ¡Gracias a Dios! Que Alá te recompense con bondad. Que Dios bendiga a todos. Todo esto ha sido posible gracias a Sheikh Adil Hachmi, desde España. ¡Alabado sea Alá, el Señor del universo! ¡Qué bien por la nación española! ¡Alabado sea Alá, el Señor del universo!
¡Gracias, España!
Cada pozo que construimos es más que una fuente de agua. Es un faro de esperanza que ilumina el camino hacia un futuro más brillante para comunidades enteras. Al dar acceso a agua potable limpia, no solo cubres una necesidad básica, sino que abres el camino para el desarrollo sostenible, la salud y el bienestar. Con tu generosa contribución, podemos llevar esta visión a la realidad.
